viernes, 15 de septiembre de 2006

Salud por el desatino

Por mera casualidad me encontré con el blog de una chava que se hace llamar Yohualli. Me pareció muy curioso que adoptara tal nickname y que a su página la haya direccionado como Yohualli tormenta, aunque la titula como Et-am; mi curiosidad y asombro fueron en aumento cuando leo algunos posts que hizo sobre Syd Barret y Pink Floyd, a quien también yo le dediqué modesto tributo, cuando la vida se le fue más allá de sus límites.

Por un momento sentí el encuentro de una alma gemela (como si eso fuera real) y me sentí cobijado de un pequeño temblorcillo en el plexo solar. Los intereses que manifiesta tener son el shamanismo, las culturas ancestrales, la medicina tradicional, el cambio dimensional del planeta, etc. Temas que otrora para mi eran caros y que recuerdo con mucho cariño el tiempo cuando estaba empecinado en lecturas de Carlos Castaneda, el budismo, la onda new age, el shamanismo y los efectos de las plantas alucinógenas. Era un tiempo mágico el que vivía; rodeado de posibilidades supramundanas.

Llegó un momento en que mis intereses cambiaron y mis ojos se abrieron frente a una creciente complejidad que mostraba eso que damos en llamar realidad. La cultura, la hermenéutica y el lenguaje se volvieron aún más caros para mi, pero articularon lo que fue con lo que ahora es.
La mujer dice pasársela entre Londres y México; tiene desde junio que no escribe y lo más reciente que subió fue su “pequeño tributo” a Syd Barret. Muchas coincidencias unidas por La Noche Yohualli. Esa oscura, que no muestra su rostro; esa que cobija los actos de los amantes; esa que permite ver las estrellas; esa que se rehúsa a despojar de su sentido onírico, mágico y espiritual al mundo moderno. Porque por más razón que haya, siempre vendrá la noche para embriagar a la razón.

No sé si sentirme un poco menos marginado o bien, compadecerme de la marginación que vive Yohualli.

Ella escribió un poema que me gustó y que ahora plagio, o más bien, no plagió sino que copio aquí como un tributo al desatino que comparten, al menos en alguna medida, por más pequeña o grande que sea, un par de seres en este planeta.

Yohualli, la noche
la noche en cada instante,
la noche dentro de mi
la noche en el parque
la noche y un cuarto de hotel
la noche y tu cuerpo
la noche y el mar
la noche, luces rojas
la noche, yohualli
la noche y mi árbol
este es mi cuahuitl,
pero solo de noche....

3 comentarios:

Yohualli dijo...

gracias por la flor Yohualli, o salud por el desatino??? chale, de una u otra forma, inspiraste en mi algunos pensamientos y para seguir con la tradicion, checa http://yohuallitormenta.blogspot.com/

Anónimo dijo...

pues suena interesante la chava, presentala no??

Anónimo dijo...

hola me gusto mucho el poema de yohualli, el otro no el que escribio la muchacha. Me llamo Ilhuitl Yohualli y me encanta encontrar cosas de mi nombre ya que creci en estados undidos y siempre me senti muy isolated por mi nombre.